
Conociendo a tu cepillo
Son unos grandes olvidados.
Un 44% de la población, es decir, casi la mitad de los españoles no se cepilla los dientes después de cada comida y un 6% reconoce no lavárselos nunca o casi nunca…
Desgraciadamente el cepillo de dientes parece más un objeto decorativo que tenemos en el cuarto de baño, que la poderosa herramienta para cuidar nuestra salud general que es. Sí, has leído bien, salud general, la boca no es un ente aislado del resto de nuestro cuerpo, de hecho es la puerta de entrada a nuestro organismo.
Todos tenemos uno, pero no sabemos casi nada sobre él. Hoy vamos a hablaros de algunas cosas importantes y de las que poco o nada se habla.
¿Cada cuánto hay que cambiarlo? Si le das poco uso, podrás pensar que la recomendación de cambiarlo cada 3 meses no es para ti, porque estas alargando la vida útil de tu cepillo al no usarlo. Siento informarte de que no es así. Al cepillo no sólo le afecta el desgaste de las cerdas, sino el acumulo de bacterias y patógenos que albergan. Si te cepillas de higos a brevas, tendrás más carga bacteriana que trasladarás a tu cepillo, a diferencia de alguien que tiene una correcta higiene. Igual de importante es cambiarlo cada 3-4 meses como desinfectarlo. Ahora que estamos tan concienciados con la desinfección, es buen momento para comprenderlo. Y en una situación tan especial como la que estamos viviendo es vital desinfectarlo al menos una vez al día. Se puede hacer de diferentes formas:
- Tras el cepillado lava el cepillo con agua con jabón con el dedo pulgar, y enjuágalo o déjalo reposar en agua muy muy caliente. Déjalo secar sin taparlo.
- También puedes meterlo en torno a 10 minutos en agua con vinagre, enjuagarlo después e igualmente dejarlo secar sin taparlo.
- Si tienes enjuague bucal en casa, también puedes meter el cepillo otros 10 minutos, lo ideal es que el colutorio lleve clorhexidina o alcohol.
- Otra opción muy recomendable en estos tiempos es meterlo en alcohol en torno a 10 minutos, enjuagarlo y dejar secar sin tapar, esta medida es muy efectiva por ejemplo cuando estamos con la gripe, y es extrapolable al coronavirus.
Si hay alguien infectado en tu hogar, es buena hora para que cambie de cepillo, ahora y cuando se recupere.
No pongáis todos los cepillos juntos en el mismo vaso en el cuarto de baño.
Y no los tapéis salvo que estén secos y el capuchón limpio.
No los guardéis cerca de la tapa del inodoro, ¡puede caer dentro! En realidad es por otro motivo pero no vamos a ser escatológicos con lo que ya tenemos encima.
Cuida de tu cepillo, necesita que le des vida: úsalo, desinféctalo, y despídete de él con tu mejor sonrisa en cada cambio de estación.
#limpiatucepillo